Noticia (Emol)

SANTIAGO.- Pese a la drástica caída que experimentaron los puntajes nacionales en el test de Matemáticas, los expertos del Comité Técnico Asesor de la PSU aclararon que la prueba no fue en esta ocasión más difícil que el año anterior.

El miembro de la entidad y académico, Jorge Manzi, detalló que el grado de dificultad de la prueba –que se mide por el porcentaje de respuestas correctas– fue exactamente igual al del año pasado, con un 32%.

Explicó que la disminución en la cantidad de puntajes nacionales en el test –de 453 a 133– se debió únicamente a que se incluyeron cinco preguntas adicionales, las que tenían el mismo grado de dificultad que los otros ejercicios.

"El grado de dificultad de esas nuevas preguntas era equivalente a las anteriores, y lo que se constató es que, en contradicción con lo que se había dicho, la prueba de Matemáticas resultó este año de la misma dificultad que la del año pasado", señaló.

Añadió que "la disminución del número de puntajes nacionales es simplemente porque había más puntajes posibles y eso permitió distinguir un poco mejor en el extremo superior (...) Es un efecto mecánico, cuando hay más posibles resultados uno puede distinguir mejor entre los que, por ejemplo, el año pasado tenían puntaje nacional".

Por este motivo, indicó que la disminución de los puntajes máximos de Matemáticas era esperable, pero reconoció que lo que sí fue sorpresivo fue el aumento de puntajes nacionales en Historia y Ciencias Sociales, de de 30 a 148.

Indicó que en este caso el aumento efectivamente se puede explicar porque el grado de dificultad de la prueba fue levemente menor al año anterior, lo que se refleja en que el porcentaje de respuestas correctas aumentó, de 40% a 42%.

"(El cambio) probablemente se explica porque la prueba de Historia resultó este año levemente más fácil que el año pasado, pero no es una materia que requiera una preocupación especial", indicó el académico.